El lunes 27 de junio se firma en Bruselas el acuerdo conocido como Pacto del Euro, el cual, según sus promotores, busca dotar a la Unión Europea de mecanismos suficientes para poder hacer frente a la crisis de deuda en la que estamos inmersos. Los paises firmantes (los gobernantes de la Zona Euro y Bulgaria, Dinamarca, Letonia, Lituania, Polonía y Rumanía) tienen previsto articular una serie de obligaciones y recortes que empobrecerán de forma alarmante al trabajador europeo, basándose en cuatro pilares, que teóricamente tendrán un efecto positivo en cuanto a recuperar la competitividad frente a otros mercados. Dichos pilares, tal y como han descrito perfectamente Juan Torres y Alberto Garzón -ambos del Comité Científico de ATTAC-, son:
1) Impulso de la competitividad: para lograr una mejora en la competitividad, los paises impulsores del Pacto del Euro recomiendan una bajada generalizada de los precios, y esta solo puede conseguirse, según ellos, mediante el descenso de los salarios, tanto de los empleados estatales como de los empleados privados. Se pretende que se reduzcan los salarios y también que se “aumente” la productividad.
Para lograr esto, se van a atacar los posibles acuerdos de subidas salariales y los procesos de negociación colectiva, intentando descentralizarlos, para que el empleador gane fuerza a costa de que sea el trabajador el que esté menos representado.
La pregunta que subyace en este punto es muy clara: Si el trabajador ve mermado cada vez más su poder adquisitivo, ¿quién va a consumir? Se generará un círculo vicioso del que solo se beneficiarán las grandes corporaciones transnacionales que no vivan exclusivamente del mercado europeo, y por contra, serán gravemente perjudicadas las pequeñas y medianas empresas.
2) Impulso del empleo: se pretende atacar la economía sumergida, al mismo tiempo que se contempla las reducciones de las cuotas que las empresas dedican a la Seguridad Social por cada empleado contratado. Teniendo en cuenta que los servicios sociales (sanidad, educación, pensiones) se deben considerar como una parte del sueldo de cada trabajador, una reducción de estas cuotas se traduce en una rebaja adicional del salario de cada ciudadano. Adicionalmente, al ver el Estado mermado su poder recaudatorio, el Pacto contempla el aumento de los impuestos indirectos (IVA, impuestos especiales, etc).
3) Sostenibilidad de las finanzas públicas: el concepto sobre el que tratan de fundamentar este cambio es la supuesta inostenibilidad de los servicios públicos. Para ello van a acometer reformas “profundas” en los sistemas de pensiones, en el sistema sanitario y en el de prestaciones sociales. Se persigue una progresiva privatización del sistema de pensiones, bajando las cuantías que reciben los jubilados y haciendo que sea más difícil y lejano en el tiempo el alcanzarlas mediante el aumento de los años de trabajo necesarios, como ha ocurrido recientemente en España, por ejemplo.
4) Reforzar la estabilidad financiera: el más importante de los cuatro pilares, por su realidad, y el que es más acuciante reformar en profundidad, es precisamente en el que los firmante del Pacto del Euro menos ahondan, dejando entrever que su compromiso en este aspecto es escaso o nulo, pues pretenden simplemente “entablar debates estructurados en torno a la política tributaria”. Mientras que en el resto de puntos se marca claramente la hoja de ruta hacia el empobrecimiento y privatizaciones, en este no se concretan medidas de ningún tipo.
Fuente: http://www.attacpv.org/web3/index.php?option=com_content&view=article&id=916:el-mayor-recorte-en-la-europa-del-bienestar-o-el-pacto-del-euro&catid=15:activitatopinioattacue&Itemid=59
Para completar el punto 2, impulso del empleo, se incide en la mejora de la formación. Pero tanto la lucha contra economía sumergida como la mejora de la formación, solo son posibles con mayores fondos públicos que esto va en contra de los puntos 3 y 4, por lo cual dudo mucho que se lleve a efecto
Para conseguir el punto 4, estabilidad financiera estableciendo que la deuda pública no supere el 60 % del PIB, en el caso de España y demás paises perifericos se recomienda la venta de empresas públicas para bajar la deuda. Pero esto tambien significa que el estado dejará de percibir los ingresos correspondiente.
Es una forma más de eliminar nuestros ya esquimados derechos. El nuevo orden mundial que nos están imponiendo los políticos tiránicos a las órdenes de los mercados. Somos mercancía. Unámonos ese 80% en todo el país, en el planeta. Pongamos un trapo blanco en la trasera del coche en señal de solidaridad con este movimiento. Yo, como cientos de miles de personas no puede asistir a las movilizaciones, pero sí podemos mostrar así nuestro apoyo y que se nos vea en todo el país. Si queréis mas info mirad mi blog (con que lo vea uno de vosotros es suficiente) donde pone mensaje original, poned y extended la idea y que se nos vea en todas partes.
http://trapoblanco.blogspot.com/
Es bien conocido y de refutada funcionalidad que una economía fuerte está basada en que sus recursos económicos reviertan en la misma sociedad que los expende. Esto es, hablando en otros términos, que el dinero circule y quede dentro del círculo cercano del que lo gasta, o lo que es lo mismo: apoyar el comercio local. Esto no significa comprar en el Zara de mi ciudad en lugar de en el de la ciudad vecina, o comer en el McMonal de mi barrio en lugar de en el del ventro comercial, sino en gastar el dinero realmente en comercios de vecinos y conocidos, dentro del círculo más cercano. Por ejemplo, donde yo resido se acaba de formar un barrio. En ese barrio los vecinos (que están muy organizados y donde impera la buena voluntad) se reúnen y deciden qué comercios y servicios necesitan. Así resumen que necesitarán una tienda de comestibles, un locutorio y un bar. Entonces se da un paso importante; en lugar de poner todos la tienda de comestibles, se decide que uno pondrá la tienda, otro el bar y otro el locutorio. De ese modo nadie tendrá que ir al bar del barrio vecino o hacer las llamadas en el centro comercial. El dinero se queda en el barrio y revierte directamente en los habitantes del barrio.
Otro gran e histórico ejemplo es el que dan los judíos. Este pueblo, conocido popularmente por su destreza económica, tiene una característica crucial, y es que si necesitan ir a un dentista, acuden a un dentista judío. Si quieren construir su casa, llaman a un carpintero judío, etc. Y la riqueza revierte en ellos.
Es sencillo, sólo se necesita voluntad y puesta en práctica.
Gracias